El agua como factor relevante en la toma de decisiones en el Agro regional

Por Pedro Ramírez Glade, gerente general de la Corporación Desarrolla Biobío

El agua es el componente universal indispensable en sistemas ambientales, sociales y económicos, cuyas necesidades deben ser balanceadas para definir su utilización. El abastecimiento de agua potable a la población ha tenido un notable desarrollo en nuestro país, llegando a coberturas de 99,9% en zonas urbanas. Sin embargo, todavía hay 700.000 personas que viven en zonas rurales que carecen de un adecuado abastecimiento.

Por su parte, desde una perspectiva económica, el agua es un recurso esencial e imprescindible, un 83% de nuestras exportaciones depende del aprovechamiento del agua. La gestión del agua en Chile ha seguido un largo proceso de construcción, desarrollado en el curso de dos siglos, que incluye, entre otros, 12.000 canales de regadío, 38 obras mayores de regulación y 50.000 captaciones de aguas subterráneas. Para gestionar todo esto, se ha desarrollado un marco jurídico institucional complejo, que a su vez ha implicado la distribución de derechos a 350.000 usuarios de aguas superficiales y 50.000 usuarios de aguas subterráneas. Al año 2015 estos derechos permitían atender una demanda consuntiva que se distribuía en 73,8% de usos agropecuarios, un 14,4% en usos mineros industriales y eléctricos, y un 11,8% en uso doméstico. Chile es un país de contrastes, con escasez hídrica desde la frontera norte hasta la Región Metropolitana, mientras que en zonas como Aysén la disponibilidad está entre las más altas del mundo.

 

En las zonas de mayor escasez, los recursos actuales son utilizados en su totalidad y los caudales vertidos al océano son mínimos o inexistentes. Algunos países han fomentado la participación de privados y realización de inversiones para un mejor aprovechamiento del agua, y a su vez, han establecido mecanismos que permiten al Estado velar por una gestión eficiente del recurso. Actualmente en el mundo existen distintas fórmulas para resolver el mismo problema, las que muchas veces responden a las diversas características hidrológicas, geográficas y de la población de los distintos países.

En Chile, el debate sobre el uso del agua se ha tomado la agenda pública, sobre todo considerando que parte importante del país atraviesa un escenario hídrico complejo, principalmente causado por las características hidrológicas áridas del norte y centro, que se han acentuado producto del cambio climático, y también en cierto modo por el continuo aumento de la demanda.

Además, existen diversas presiones desde la sociedad civil y de algunos expertos que llaman a revisar la regulación. No se puede desconocer que el cambio climático tendrá impactos sustanciales en el país y en su desarrollo por lo que se deben tomar medidas que enfrenten los cambios en la disponibilidad hídrica, en el aumento de temperaturas, el cambio en la distribución estacional de los caudales debido a la disminución de las superficies cubiertas de hielo y nieve, entre otros. Existen pocos elementos como el agua que estén tan directamente relacionados con la vida humana y la naturaleza, y al mismo tiempo, con el desarrollo económico.

Como Desarrolla Biobío hemos puesto un especial acento en prepararnos para los escenarios futuros que consideren la escasez hídrica en el desarrollo productivo agrícola de la región. Por lo mismo, es un indicador relevante al cual le hacemos especial seguimiento en el monitoreo que hacemos de la Estrategia Regional de Desarrollo del Biobío.

Como corporación hemos organizado webinars sobre el mejoramiento de las técnicas de regadío en el agro, entendiendo que el proceso de tecnificación de riego es un proceso lento, pero el cambio climático nos obliga a avanzar más ágilmente en estas materias, por lo cual seguiremos en la senda de la capacitación y la identificación de nuevas tecnologías.